El lema del Día Internacional de la Mujer del 8 de marzo de 2023 es “Por un mundo digital inclusivo: Innovación y tecnología para la igualdad de género”. Se reconoce a las mujeres, niñas y organizaciones de mujeres que luchan por el avance de la tecnología y por una igualdad en el mundo digital.
Además de las diversas formas de violencia sobre la mujer, definidas como todo acto de violencia por la pertenencia al sexo femenino con un daño psicológico, físico o sexual, actualmente hay que tener en cuenta nuevas formas de violencia de género que aparecen paralelamente al desarrollo de las nuevas tecnologías. Estas nuevas conductas se ejercen a través de redes sociales e internet. Es la llamada violencia de género digital.
Este ciberacoso es una nueva forma de limitar la libertad de la mujer, ejercer dominación y relaciones en desigualdad entre hombres y mujeres, que han tenido o tienen una relación afectiva. Sufren violencia digital tanto mujeres adultas como en especial, un colectivo muy vulnerable, la adolescencia. La población adolescente se encuentra muy cómoda en internet y las redes sociales. En estos ámbitos se muestran tal cual son, sin máscaras ni engaños. Piensan que compartir imágenes privadas, quedar con una persona desconocida por internet o el control por parte de la pareja por redes sociales es algo común, habitual e inocuo.

Pero hay signos que indican que se está produciendo violencia digital: controlar a la pareja en redes sociales, espiar su móvil, obligar a entregar las claves de acceso, enfadarse cuando no se contesta a un mensaje online y otros muchos que ya se han normalizado.
Si se están sufriendo estos signos de violencia de género, hay que explicar la situación a otras personas y pedir ayuda. Buscar el apoyo de amistades y familiares, en el centro escolar, incluso en el centro de salud.
Es normal que las mujeres sientan que aún quieren a quien se comporta así. A menudo buscan razones para justificar el comportamiento (“es tan celoso porque me quiere””, “si soy buena esposa puede cambiar”, etc.), Estas creencias son falsas y confunden a la víctima. Hay que entender y hacerle entender que ella nunca es la culpable de la situación, sino la persona que la padece y que puede salir muy mal parada.
Por eso nos parece importante insistir en cuestiones prácticas y específicas:
Es imprescindible que se pongan cuanto antes en contacto con el teléfono gratuito de información y asesoramiento jurídico 016, un servicio público puesto en marcha por el Gobierno contra la violencia de género, en funcionamiento las 24 horas del día, y en el que la mujer será atendida por profesionales especializadas en esta materia. Este servicio garantiza la confidencialidad de los datos de las personas usuarias, no deja rastro en el teléfono y atiende en 53 idiomas. También se puede comunicar por WhatsApp en el número 600 000 016 y por correo electrónico escribiendo a: 016-online@igualdad.gob.es.
Para poder evitar la violencia de género es necesario fomentar e inculcar la educación de las relaciones de respeto, así como la igualdad de género, en edades tempranas. El trabajo con jóvenes es la mejor opción para conseguir un progreso rápido y sostenido en lo que respecta a la prevención y erradicación de la violencia de género.