Cuantas ganas de empezar a sobrevolar partiendo del punto de inicio sin más artimañas que las propias de nuestro carácter. Personalidad, ¿desde y hasta dónde? Reflexiones del pensamiento que nos dan un fragmento de seguridad.
Que se necesita para definir la voluntariedad de nuestros hechos, apenas un ratito de sensatez que incremente nuestra autoestima.
Dando un giro preguntémonos, ¿Qué cantidad o cuál es el peso de nuestros sentimientos? Como si fuese algo que transportar de vez en cuando y se pudiesen aparcar, utilizándolos en alguna ocasión.
Seamos osados y dispongámonos a construir la posible felicidad de una manera realista, auténtica y profunda.